Páginas

domingo, 26 de agosto de 2012

BARRANCO de las BUITRERAS

El pasado sábado tuvimos el placer de disfrutar de la belleza de las caprichosas formaciones de este desfiladero, de su inmensidad y del juego que da, saltos, rápeles, destrepes, túneles… en fin una auténtica pasada. El viaje pesado y largo, pero, hay que sufrir que estas cosas, ¡por suerte!, no están al alcance de la mano. Accedemos por el cercado del cabrero, para evitar la peligrosidad de los túneles y tras un paseito llegamos al impresionante puente de los alemanes de unos 70m de altura, que luego veremos desde abajo. Llegamos al río y nos embutimos literalmente en el traje de neopreno, que es absolutamente necesario pues hay tramos muy sombríos. Empezamos el recorrido y al instante realizamos el primer rappel, lástima que no hacen cascadas, pero si disponemos de tramos abundantes de agua, donde realizamos algunos saltos. A medida que avanzamos el cauce se va estrechando, las formas se hacen aún más caprichosas, y cada vez, van aumentando la altura de las paredes que sobrepasan los 100m; llegamos a la zona que le llaman los oscuros, apenas penetra la luz y mientras tanto, nadando con cara de asombro. Cuando empezamos a ver la luz y salimos del agua, atravesamos un caos de bloques, que se convierten en un laberíntico sube y baja. Al final llegamos a una gran poza donde hay que nadar unos 300m, que a mitad del trayecto se abastece del un nacimiento, que le da frescura y viveza a las aguas. Llegamos a una playa donde los vecinos del lugar disfrutan, y donde nosotros finalizamos el recorrido. Tras un corto trayecto llegamos a la estación de Gaucín donde reponemos fuerzas y para casita. Otro estupendo día para repetir. Un saludo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario